viernes, 31 de diciembre de 2010

It doesn't fit!

¡Oh si! Disculpen mi título en inglés, pero creo que es la expresión que realmente expresa toda esta experiencia que he estado viviendo.

No es bueno, ni malo, simplemente en nuestro caminar diario, vamos tomando decisiones que nos llevan a una consecuencia, muchas veces dolorosa, otras veces, placentera. Ya saben esa expresión de "No pain, no gain" en este caso, aplica.

Y si que ha sido doloroso, pero también parte de un crecimiento importante en mi vida. Si, cada vez que crezco, me duele, cada vez que hay cambio, la transformación va cargada de emociones, deseos, sueños... Y es que estoy en manos del alfarero. Y vaya que he comprobado que eso de pasar por el fuego, quema...

Situaciones se presentan, y siempre a través de nuestras decisiones, vamos marcando el paso, un, dos, tres.

Aunque a veces postergamos esas decisiones, por distraídos y por cómodos, si, nos acomodamos y somos felices cuando encontramos una situación que desvía nuestros ojos de la meta final. Y la verdad es que se siente tan bien, ¿cuál es la necesidad de seguir? ¡Es cansado! Y quedarse jugando es tan placentero. Pero, ¿dónde quedan los sueños y metas?

¡Uf! Las peores batallas son aquellas que tenemos en la mente. Trillado, si, pero sigue siendo una lucha que no se extingue. Nuestro peor enemigo, uno mismo, qué mejor persona para sabotear que uno mismo. Acompañado de la culpa y la confusión. ¡Qué difícil! Tratar de callar nuestra propia crítica, nuestra propia voz.

Pero también existe aquella voz que te recuerda el propósito por el cual naciste, tu sueño, tu meta, tu verdadero yo. ¿Porqué es tan fácil perderlo? ¿Porqué es tan fácil regalarlo al olvido? ¿Cambiarlo por personas o cosas que "parecen" tu sueño? ¿Porqué tirar las perlas a los cerdos?

It doesn't fit!

¿Cuántas veces has sentido que encajas? Pero... A la mera hora... ¡No! Y por más que intentas que funcione, cada vez se vuelve más difícil, más frustrante, y si sigues aferrándote, los resultados terminan en desastre con heridas, tristezas, y con daños a terceros. ¡Si! Lo sabías, en el fondo de tu corazón sabías que no era por ahí, pero, "el que no arriesga, no gana" ¿cierto? Tal vez, hace falta un poco de más discernimiento para sabernos guiar, o estar más atentos a lo que nos dice Dios a través de nosotros mismos en nuestro corazón.

La mejor parte, es cuando a pesar de todo, te levantas y sigues adelante.

Una vez más Dios, a través de la debilidad, muestra fortaleza, y enseña que dependemos de él para seguir adelante. Mi humanidad es tan endeble, tan equìvoca, tan cansada... Si, yo decido, tengo libre albedrío, y decido amar a Dios, y poner mi confianza en el. "Los que amamos a Dios todas las cosas nos ayudan a bien" y todo tiene un propósito.

Nos quedan experiencias, para analizar, para que la próxima vez podamos hacerlo mejor, o decidir no hacerlo de la misma manera.

Levantarse, ser valiente, y renovarse, sin rencores, sin malos pensamientos.

Con la frente en alto, aprovechando una oportunidad más para volver a empezar. Para seguir dando todo a pesar de no encajar. Seguir dando amor y perdonar.

Seguro donde si encajas es en tu sueño, en tu meta, donde Dios te ha puesto.

Gracias Dios por escuchar mis oraciones, aún cuando pensaba que no actuabas, ahora veo que tus caminos no son mis caminos, y que me das lo mejor, aún sin yo saber lo que hay delante. Gracias por endurecer esos corazones en su momento para sacarme de la situación que no es conveniente para mi.

Doy gracias porque a pesar de todo, tengo una nueva oportunidad para comenzar (y tal vez volver a caer).

Gracias por aquellas personas que no me dejan quedarme tanto tiempo en el suelo. Esos amigos, que te dan la mano, y que demuestran que el amor echa fuera el temor.

¡Qué bueno que no soy de este mundo!
Enviado desde mi oficina móvil BlackBerry® de Telcel

3 comentarios:

Claudia Torres dijo...

ooo Jaque, fijate q después de mucho tiempo, no le se todavía muy bien a esto de los seguidores, creo que eres mi primera seguidora jajaja¡¡¡ gracias! tampoco tenía bien ubicado tu Blog.. pero q padre, nos sirve de desestrés, no?

Anónimo dijo...

Pasando a decir que que padre escribes!!! Cada día se aprenden cosas super lindas! Muy lindo tu blog y este artículo. Un abrazo mujer!!
Diana Castañeda

Jarla dijo...

¡Oh! ¡Wow! gracias por leerme Diana =) qué sorpresa verte por aquí. Espero que sea seguido, y gracias por la opinión, jeje aquí andamos al pendiente.
Un abrazo para ti también.
¡Bendiciones!